Humedad por condensación

E

sta es la época del año en la que este fenómeno está en su máximo apogeo y debemos observar su evolución para tomar medidas en cuanto mejore la temperatura exterior con la llegada de la primavera. Mientras tanto podemos llevar a cabo algunas acciones que minimicen este fenómeno. 

Qué son las humedades por condensación:

La humedad por condensación consiste en la aparición de agua en estado líquido en alguno de los cerramientos de la vivienda, paredes, vigas, ventanas… Estas humedades se deben a la alta temperatura del aire en el interior de nuestra vivienda en forma vapor de agua, al contacto con los cerramientos fríos y la baja temperatura exterior se condensa produciendo el agua líquida. Es un cambio físico y natural del agua.

Un buen ejemplo para entender el fenómeno de la humedad por condensación es observar como se queda el espejo de nuestro cuarto de baño tras una ducha de agua caliente. La humedad que contiene el aire se transforma en gotas de agua en contacto con la frialdad del espejo.

Las condensaciones que se producen en nuestras viviendas están ligadas a muchos factores: la temperatura de los cerramientos, la existencia de un buen aislamiento, la temperatura de nuestra vivienda y la renovación del aire.

Las humedades por condensación pueden causar un daño estético, por favorecer la aparición de hongos y moho, a su vez pueden afectar seriamente a nuestra salud sino intervenimos.

Tenemos que observar si la condensación solo se produce en el exterior de las superficies en forma de vaho o bien vienen desde el interior de nuestras paredes, vigas y otros cerramientos.

Tal como os comentamos estas humedades se manifiestan normalmente en forma de vaho en los cristales, si el problema se agrava comenzaran a aparecer algunas manchas negras en suelos y techos, en las zonas en las que se produzca, nos delatara parte del origen del problema.

Consejos para minimizar/solucionar:

• Ventilación periódica para renovar el aire interior, de al menos 10 minutos cada día.
• Comprobar la existencia de aislante térmico en nuestra vivienda/edificio, es muy común que nos preocupemos de hacer cambios en nuestras ventanas por unas de mayor calidad y aislamiento, pero no nos ocupemos de las paredes. Si a un cambio de ventanas le sumamos la ausencia de un buen aislamiento, vamos a provocar puntos fríos y la condensación no tardara en aparecer. Tenemos que tener en cuenta que una carpintería nueva debe tener rotura de puente térmico y deberíamos aplicar algún sistema de aislamiento adicional a nuestras paredes si estas carecen, con el ya citado rompedor de puentes térmicos.
• Usar la calefacción de una forma racional, el aire caliente admite una mayor cantidad de humedad que luego se transmitirá a nuestros paramentos, contra mayor diferencia entre temperatura interior y exterior mayor condensación vamos a provocar. Se recomiendan temperaturas interiores de 21º en invierno y 26 º grados en verano.
• Evitar la producción de vapor innecesaria. Ventilar nuestros baños tras las duchas de agua caliente, utilizar el extractor de cocina siempre que cocinemos o tengamos abierta lavadora y/o lavavajillas. También es importante evitar el secado de ropa en el interior de la vivienda.
• Si algunas de estas acciones no se pueden realizar podemos instalar algunos deshumidificadores tanto en focos de alta condensación como en el resto de la vivienda para minimizar la humedad existente. Nosotros os recomendamos AERO 360 RUBSON.
• Si se ha deteriorado la pintura y tenemos que hacer un repintado, os recomendamos el uso de pinturas transpirables que no generen barrera de vapor.